Capitulo 2; Declaración de amor
Pensó
sin apartarse ni un poco de aquellos
suaves labios
Se separó solo unos milímetros, quedándose perdido en aquel
angelical rostro… lucia tan puro e inocente, acaricio con suavidad su mejilla
depositando un beso en su frente, no supo cuánto tiempo estuvo contemplándolo,
solo que de un momento a otro el sueño venció sus ojos, sintiendo como sus
parpados comenzaron a cerrarse quedándose profundamente dormido.
La mañana llego fría y lluviosa, se podía sentir por el frio
que se colaba por la ventana pegando en su rostro, con pereza abrió los ojos, tallándoselos
un poco al momento que bostezaba, se sentía pesado… un momento ¿porque Nakajima
estaba sobre él? Aparte de invasor de espacio privado, también ¿era un violador?
¿Que se aprovechaba cuando todos dormían?, en su cara se mostró el pánico, su
reacción fue rápida sacándolo de encima suyo a patadas, lógicamente Yuto cayó
al piso.
-Ay!-Lloriqueo Yuto al ser impactado contra el suelo.-eso te
pasa por tratar de abusar de mí!-Le dijo Yamada tapándose con las sabanas, Yuto
lo miro fulminante, si lo peor que le podían hacer era levantarlo, su humor no
era nada bueno y Yamada había sacado ese lado oscuro y temible.
-Yamada Ryosuke…-Hablo con calma-¿PORQUE RAYOS ME AVENTASTE DE LA CAMA?!-Grito
asustando un poco a Yamada, esperen un momento Yuto le había gritado a él, nadie
tenía derecho de gritarle, absolutamente nadie…. Mama si les esto, tu si
puedes, si le tenía respeto a su mama hasta con el pensamiento y ¿qué? –Cállate
Nakajima, casi fui violado por ti… VI-O-LA-DO! ¿Entiendes? –recalco
señalándolo, Yuto se quedó callado esto hizo que Yamada mirara hacia donde
estaba la mirada del alto, sintiendo un escalofrió recorrer su espina dorsal al
verse a sí mismo, es que acaso ¿le estaba viendo su desnudo y descubierto
pecho?-¿q-que tanto miras?-pregunto con nerviosismo, pero no hubo respuesta.
-NAKAJIMA! DEJA DE VERME CON ESA CARA DE
PÈRVERTIDO-DEPRAVADO-SEXUAL-Le grito Yamada volviendo a taparse con las
sabanas, como si fuese chica.-¿Depravado sexual?... ahh yo no soy un depravado
sexual, ni mucho menos intente violarte!... ni que estuvieras tan bueno para
hacerlo.-murmuro esto último, levantándose del piso para entrar al baño.
-¿No estoy bueno?-Se preguntó así mismo mirándose al
espejo-claro que si lo estoy o ¿no?-Pero que rayos, pero que estupideces se
preguntaba, el idiota de Nakajima le hacía poner su vida de cabeza.
Salió de la habitación, era sábado y no habría clases así
que prepararía un buen desayuno solo, porque el niño rico no sabía hacer nada,
se dirigió a la cocina, pensando en que sería bueno desayunar, abrió su refri y
sorpresa.-no puede ser…-o no esto no le podía estar pasando, aparte de que su
mama se iba no le dejaba nada para hacer comida, tenía que ir al súper con el
poco dinero que tenía, si porque ni siquiera eso le dejo, no sabía cómo iba a sobrevivir
todo ese tiempo. Saco un suspiro, tomo su chaqueta dirigiéndose a la puerta.- Maldición
casi lo olvidaba…- No podía dejar a Yuto, ese era un desastre en casa y no se quería
imaginar que sucedería si lo dejaba solo, y sin desayunar. Así que espero a que
este bajara, al menos lo utilizaría para que cargara las bolsas.
Al pasar unos minutos Yuto bajo de lo más relajado, con esa
sonrisa de idiota que siempre tenía.-Nakajima, iremos al súper, así que
prepárate.-Yuto lo miro y sonrió emocionado, jamás había ido al súper, y eso de
alguna forma le emocionaba.- Vamos!!-Grito lleno de emoción.-no pensaras ir así
¿verdad?-lo miro de arriba abajo-¿Qué tiene de malo?-hablo Yuto mirándose así
mismo.
-¿Qué tiene de malo? Todavía me preguntas!, Nakajima tienes
tu pijama-hablo Yamada, claro que ese no era el problema, pero es que aquella
prenda tenia patitos.-¿Y? así me siento cómodo así que vamos!- y sin más salió
de la casa arrastrando a Yamada con él.
-ya viste que si era un problema!-hablo Yamada caminado con más
rapidez, al sentir las miradas de las personas sobre ellos.-
-Realmente no me importa la opinión de las personas-Hablo
Yuto caminando de lo más relajado, Yamada solo saco un pesado suspiro después
de todo quizá solo quizá Nakajima tenía razón.
Al cabo de unos minutos se encontraban en el súper, Yuto
tomo un carrito y se subió en el.-vamos, llévame!-hablo Yuto con emoción,
Yamada solo lo miro raro.-bájate de allí, todos nos ven raro, y no me importa
que no te importe lo que las personas opinan de ti.-Yuto solo hizo un puchero y
se bajó refunfuñando.
-bien veamos que llevaremos-Murmuro Yamada mirando la
mercancía y obviamente el precio más que nada, no supo cómo fue que paso, pero
cuando se dio cuenta el carrito ya estaba casi lleno, obviamente había un culpable
y ese era Yuto.
-ah, este también… y este, esto también…-Hablaba Yuto
colocando todo lo que estaba a su paso en el carrito.-¿Qué haces?-Hablo Yamada
alejando el carro del menor.-Comprando!-Definitivamente Yuto era más torpe de
lo imaginado-¿Por qué rayos compraste esto?-saco aquella bolsa enseñándosela a
Yuto, el menor lo miro y sonrió.-la compre para ti, es para que crezcas, ahí
dice para un buen crecimiento!-No ahora si Yamada lo mataba.-
-IDIOTA! Este es comida para perro!!!! Y lo peor de todo es
que ni perros tenemos!-dijo Yamada enfadado-ya, ya, ya, tampoco es para que te
enojes, te saldrán arrugas por ello.-hablo Yuto de lo más relajado.-si no
quieres crecer es tu problema.-Murmuro Yuto, Yamada trato de calmarse aunque le
resultaba demasiado difícil, realmente Yuto lo sacaba de sus pocos cabales que
aún le quedaban.
Después de una hora todo estuvo listo, ambos regresaban a casa…
pero había un pequeñísimo detalle-porque rayos él estaba cargando las bolsas y
Yuto no-pensó Yamada lanzándole una mirada fulminante al menor, quien solo le
regalo una sonrisa.
-¿Yama-chan?-Pregunto un chico que se paró frente al
bajito-eh… Daiki…-El chico de cabello castaño se lanzó abrazando al menor.-Te he
extrañado mucho!, que milagro encontrarte por aquí.-Yamada trato con todas sus
fuerzas de no caer, pues el peso de las bolsas era suficiente como para que
viniera Daiki y fuera otro peso más.-
-¿Cómo puedes extrañarme, si apenas ayer nos vimos?-Hablo
por fin Yamada, Daiki lo vio e hizo un puchero-¿ahora es malo extrañar a mi
mejor amigo?-Yuto observaba todo esto, de manera nada buena, ¿Cómo rayos se atrevía
ese orejón abrazar a Ryosuke?, y lo peor de todo es que era ignorado
completamente.
-no, no es malo, pero bueno dejemos ese tema de lado, sobre
lo demás… sabes que no me gusta salir de casa pero las circunstancias en las
que me encuentro no son las mejores, mi mama se fue de viaje y me dejo sin
comida así que tuve que ir al súper…-explico Yamada-¿entonces estarás solo en
casa?-pregunto Daiki con cierta emoción, que fue distinguida por Yuto, podía
soportar que lo ignoraran , pero el hecho de querer coquetear con Yamada era
imperdonable
-no está solo, él está conmigo-Interrumpió Yuto mirando a
Daiki fulminante-¿Quién eres tú?-pregunto Daiki al notar aquel chico alto,
Yamada solo saco un pesado suspiro-es verdad por mala suerte no estoy solo, él está
conmigo… es el hijo del jefe de mi mama-hablo Yamada, Yuto sintió muy en el
fondo tristeza por la forma en que hablo Yamada, jamás le había importado la
opinión de las personas, pero con Yamada era diferente.
-si, por mala suerte… entonces me voy, quédate con tu
amiguito! Nos vemos en la casa-refunfuño Yuto comenzando a caminar con
rapidez-oye, espera… no me puedes dejar con todo esto…-le grito Yamada, pero
Yuto no lo escucho.-IDIOTA!-Gruño Yamada-supongo que no se llevan bien,
¿Quieres contarme?-Yamada solo suspiro y asintió, Daiki tenía que sentarse pues
la historia iba para largo a pesar de haber pasado solo un día, pues con Yuto
en ella, miles de cosas podían suceder.
-*-*-*
Yuto miraba el televisor, mirando de vez en cuando a la
puerta, Yamada estaba tardando mucho con
su estúpido amiguito, saco un suspiro tratando de calmarse, era extraño
en el… que se comportara de esa forma… jamás lo había hecho, pero Yamada era el
culpable de todo, por ser tan tonto, tan inocente, tan puro, tan adorable, tan…
único.
Paso una hora volando y por fin la puerta fue abierta, de la
cual entro Yamada casi cayéndose por el peso de las bolsas-¿Qué no piensas ni
ayudarme a meter todo esto?-Pregunto un enfadado Yamada-No!, porque no traes a
tu “amiguito” que te ayude…-Alego Yuto con fastidio, Yamada no entendió la
forma de comportarse de Yuto, jamás lo había visto así, o al menos no en el
tiempo que tenían de conocerse.
-¿A dónde vas?-Pregunto Yamada al ver que Yuto, se dirigía a
las escaleras-a la habitación, quiero dormir un poco.-Aparte de no haberlo
ayudado, todavía tenía el descaro de decir que iría a descansar, esto era el
colmo… pero trato de calmarse-¿acaso ya has comido?-Pregunto nuevamente Yamada-
-no tengo hambre.-Fue la corta respuesta que dio y subió sin
siquiera mirar a Yamada-eres un maldito bipolar-Murmuro Yamada caminando hacia
la cocina para dejar todas las bolsas, realmente Yuto parecía tan relajado
pero entonces porque reaccionaba de esa
manera.
Por fin todo estuvo preparado, era hora de empezar a comer,
pero muy en el fondo la conciencia le remordió al saber que el idiota de Yuto
no había comido nada, después de todo su mama se lo había encargado… oigan
esperen se supone que el encargado era el, pero definitivamente con Yuto como
su niñero moriría de hambre y si no de alguna explosión o quemaduras de tercer
grado. Saco un pesado suspiro y subió a la habitación, sin siquiera tocar
entro, encontrando al menor sentado en la cama, con su mirada perdida hacia la
ventada.
-Nakajima… y-ya está la comida…-se le dificulto hablar, era
un poco difícil que el rogará alguien, pero como buena persona que era lo
haría… Yuto solo lo ignoro, esto hizo enfadar a Yamada, nadie, nadie lo ignoraba
y mucho menos en su propia casa!-oye te estoy hablando!-se acercó Yamada un
poco, pero nuevamente fue ignorado-NAKAJIMA!!! A MI ME ESUCHAS Y MIRAS CUANDO
TE HABLO-Grito Yamada apuntándole con el dedo, no supo en que momento pasó pero
de un momento a otro se vio acorralado bajo el cuerpo de Yuto, quien lo sostenía
de ambas manos, sobre la suave cama.
-¿q-que haces?-hablo Yamada con cierto nerviosismo, Yuto lo
miraba con enfado-¿Qué pretendes? ¿Volverme loco?-Pregunto Yuto alterado,
Yamada no entendía nada-¿de qué rayos hablas? Solo vine a ofrecerte de comer,
pero si no quieres haya tu problema, ahora déjame-respondió Yamada tratando de zafarse,
pero era imposible Yuto lo tenía sostenido de manera fuerte-
-Ryosuke! Tu me…
gustas!-Finalizo Yuto, sin poder contenerse capturo los labios del
castaño quien se quedó sorprendido y paralizado al escuchar aquello.
¿puedes corresponder
mis sentimientos… Ryosuke?
Continuara...
PD:Hola, solo pase rapidito a dejar la continuacion, es que este fic esta siendo escrito porque las ideas fluyen solitas :D y bueno me gustan sus comentarios u///u y mas aparte nadie me da Yamajima, tengo que alimentarme a mi misma <//3 bueno espero os guste :3
awwwww me encanta este fic y si otra vez me dejaste picada con la historia aaaaa ya kiero leer el próximo capitulo :3
ResponderEliminarasdaxaadasda volvi a morir me mato la imagen de Yuto con un pijama de patitos kawaii y luego sus celos y la declaración tan espontanea es hermoso *--* ya quiero leer lo demás y saber que le dirá Yamada; me encanto el capi C:
ResponderEliminarWaaaa asdasdasdasda me encanta *O* que lindo es yuto tan adorable, me dan mucha risa los dos jajajajajaja esta super mega genial! Esperare el proximo capitulo con ansias
ResponderEliminarAl fin lo leí!!
ResponderEliminarEsta super super interesante! Me encanta esa relación amor-odio de Yama-chan y Yuto... Y Daiki metiendo las narices!
Me gustaron mucho los dos primeros capítulos, espero la continuación ヽ(^Д^)ノ
Pensé que había comentado =.="
ResponderEliminarEn fin, lo de la pijama de patitos me mató y sus peleas son tan afjafklahsfa xD
Ya quiero saber que le responderá Yamada *___*