“Te necesito solo a ti”

“Te necesito solo a ti”

Autora: Amy Nakajima

Pareja: YamaJima, InooDai/Nakachii, Ariyama

Género: Yaoi, Lemon, Romance, Angust

Extensión: Mini Serial

Capítulos: Indefinido.

Capítulo 1: Un desconocido entra a mi vida

No entendía este sentimiento… hasta que te fuiste de mi lado

La distancia me ha obligado a darme cuenta de la realidad, estaba acostumbrado a que nadie invadiera mi espacio, sin en cambio a ti no te importo y entraste en el traspasando mis barreras y ocupando cada espacio de mi corazón, solo me di cuenta de eso ahora que no estas a mi lado, ¿dime qué hago? si todo lo mío inclusive yo te pertenecemos…

Soy Ryosuke Yamada un chico de 19 años de edad, me considero, estudioso, me gusta leer, soy sociable, solo que no salgo mucho de casa, trato de sacar siempre buenas notas sé que eso me llevara al éxito y daré lo mejor a mi madre que siempre se ha esforzado por sacarme adelante sola, también y lo más importante para mí, soy amante de la limpieza, no me gusta el desorden.

Caminaba de regreso a casa seguramente mi madre no estaría, eso lo sabía de sobra pues trabajaba todo el día para llevar dinero a casa, no soy el hijo perfecto pero trato de serlo por ella, que me ha dado todo.

Abrió aquella puerta al momento de entrar, todo estaba en absoluta calma y silencio, como siempre... pero algo andaba mal pues olía a quemado, con suma preocupación corrió hacia la cocina, la cual estaba hecha un desastre total.

-¿Pero qué rayos paso aquí?  -Murmuro con asombro más qué nada, de pronto un ensordecedor ruido comenzó a escucharse por toda la casa, se tapó como pudo sus oídos y corrió hacia dónde provenía aquel molesto ruido, subió las escaleras acercándose más y más un momento ¿por qué el ruido provenía de su habitación?, de su lugar de calma, de su lugar de tareas, era un lugar casi, casi ¿santo?  

Bueno tampoco para tanto, pero si era su espacio privado.

-¿Y si es un ladrón o tal vez un fantasma!?

Su cara se puso más blanca de lo que ya era, tomo lo primero que vio para su defensa y con mucho más cuidado comenzó acercarse, estando cerca de esta solo giro con suavidad la perilla abriendo despacio, y lo primero que vio no era precisamente un ladrón o fantasma, o al menos no tenía rostro de ello.

-¿Quién eres? y ¿qué haces en mi casa-cuarto? -Exclamo un asustado Yamada, apuntándole con lo que llevaba, llamando por obvio la atención de aquel desconocido. Quien dejó aquellas baquetas sobre aquella hermosa batería, al momento qué sus oscuros y penetrantes ojos se posaban en Ryosuke.

No dijo nada solo poso una sonrisa, reincorporándose haciendo ver la diferencia de estaturas, se alejó de aquella batería solo para acercarse al bajito. -¿Me querías atacar con una escoba? -Dijo aquel desconocido soltándose a reír a carcajadas- ¿esto es enserio? -volvió a reírse sobándose el estomagó.

Yamada solo arqueo una ceja, sintiendo como el miedo comenzó alejarse.-basta! deja de reírte y dime ¿Quién rayos eres? -volvió apuntarle con la escoba-eres muy divertido Yamada-kun- Respondió el alto, regalándole una sonrisa. -Soy Yuto Nakajima un placer -Se reverencio, Yamada lo miro mal y seguía esperando una explicación sin siquiera moverse de su postura.

-ya, ya, está bien te daré una explicación, pero como no se me da el explicar, ni las matemáticas, ni la historia, ni mucho menos el inglés… bueno eso no tiene nada que ver, supongo…-Yamada solo lo miro extraño, Yuto saco un suspiro sacando una nota de su bolsillo.- toma.-Le dijo entregándole aquel pedazo de papel, Yamada la tomo aun con desconfianza, al momento que comenzaba a leer.

“Hijo perdona si no te avise antes, pero tuve que salir de emergencia con mi jefe, hacia el extranjero. No sé cuánto tiempo demore... así que para no dejarte solo te deje a cargo del hijo de mi jefe, sé que te sabrá cuidar... pórtate bien y se amable con él, no dejes de comer. Hasta pronto hijo Te quiero.- Tú mama.”

¿Esto era enserio?, debía ser una broma de muy mal gusto, no le podía estar sucediendo aquello. Lo dejaban solo y no solo eso encima se quedaría en manos de un ¿completo desconocido, loco, psicópata, invasor de espacio, que lo miraba con cara de idiota?

-así que estas a mi cuidado, cachetón!-Exclamo Yuto con entusiasmo, al momento que le jalaba una de sus mejillas, ¿en qué momento fue que bajo la guardia?-Aléjate! Psicópata invasor de espacio!-¿psicópata? ¿Yo?-se auto señaló comenzando a reír nuevamente-no, no, estas equivocado, yo soy un futuro baterista.-Le respondió sonriéndole, Yamada solo hizo una mueca desagradable.

-por cierto, iba a preparar algo de comer… pero emm creo que la comida se quemó un poco…-murmuro esto último.-¿Un poco? Acabas de quemar casi toda!! La cocina y dices un ¿poco?, no me imagino que será un mucho de tu boca-Exclamo un exaltado Yamada.-eres muy exagerado.- Dijo Yuto sonriéndole.

Calma, calma, se auto mentalizaba, debía controlarse… control, tomo un poco de aire antes de hablar.-Bien Nakajima-kun, si vas a vivir aquí, solo déjame aclarar algunos puntos y cuáles son las reglas de esta casa-Yuto no dijo nada solo escucho lo que tuviera que decir el castaño-la primera y más importante, esta es mi habitación ¿entiendes? Mia, mi cuarto, mi cama, mi ropero, mi ropa, mi baño, mis cosas, lugar privado MIO!.-Recalco lo último.-así que te mudaras al cuarto de mis padres ¿entendiste?.-Yuto movió la cabeza en forma de afirmación.-si.-

-La segunda, no vuelvas a entrar a la cocina sin que yo esté presente, esta estrictamente prohibido que lo hagas, no quiero quedarme sin cocina por alguna explosión ¿ENTENDISTE?- Quizá exagero un poco pero necesitaba aclarar que odiaba el desorden-vamos, no es para tanto, solo fue un pequeño descuido-bromeo Yuto.-dije ¿entendiste?-Habló nuevamente Yamada, Yuto solo asintió nuevamente.

-bien, y la última por el día de hoy pero igual de importante que todas las anteriores, no me gusta el desorden, así que limpiaras tu habitación, al igual que los quehaceres de la casa serán divididos para ambos… ¿entendiste?.-Yuto rascó un poco su cabeza, nunca se le había dado el hacer algún tipo de aseo en casa, pues el tenia sirvientes que le hacían todo, no tenía ni idea de cómo se hacía aquello, pero la mirada del bajito daba miedo, suponía que no iba a ser tan difícil.-sí, claro.- Respondió finalmente.

-creo que por ahora sería todo.-Se quedó pensado si faltaba algo más, Yuto sonrió alborotando sus cabellos-luces muy adorable, pero definitivamente eres todo lo contrario.-Sonrió, saliéndose del cuarto, Yamada reacciono y salió tras el.-espera ¿a dónde vas?, tienes que sacar tus cosas de mi cuarto!-

-después, ahora tengo hambre y como tengo prohibido entrar a la cocina o bueno lo que resta de ella, pediré algo de comer.-le sonrió y siguió su camino-oye, tu destrozaste la cocina, además no tenemos el suficiente dinero para despilfarrarlo, así como así!-Gruño Ryosuke, Yuto no hizo caso y tomo el teléfono.-

-No te preocupes, diré que lo carguen a la cuenta Nakajima.-Hablo con tranquilidad el alto, mientras esperaba una respuesta del otro lado de la línea.-Nakajima!, recuerda que esta no es tu casa, aquí no se tiene todo lo que se desee, así que cuelga de una vez por todas ese teléfono.-Exclamo un exaltado Yamada, Yuto siguió ignorándolo, esto solo lo hizo enfurecer, así que corrió hacia él, sintiendo como su pie tropezaba en el último escalón.

-Maldición, esto no me puede suceder a mi…-Murmuro Yamada.- Yama-chan ¿te caíste?.-Le pregunto Yuto, sin moverse de donde estaba.- No, que va, si le estoy dando un abrazo al suelo!...-Yuto comenzó a reír.-Tonto, al suelo no se le dan abrazos.-

Yamada se puso de pie y comenzó a caminar hacia Yuto, con una mirada nada amigable… más bien ¿asesina?.-Cuelga ese teléfono ahora!.-Dijo Yamada tratando de quitarle el teléfono, pero Yuto fue mucho más rápido elevándolo hacia arriba. Así ambos comenzaron a forcejear, pero definitivamente la altura de Ryosuke no ayudaba en nada, no supo en que momento sucedió solo que cuando se dio cuenta estaba en los brazos de Yuto.-eres más delgado de lo que imagine-hablo Yuto, quien lo tenía sostenido de la cintura.- suéltame!!.-Yuto poso una sonrisa, acercándolo más a su cuerpo.-no, no lo hare… hasta que me dejes pedir algo.-Yamada le mordió el brazo-auch!-lo soltó.

-oye eso dolió, yo solo quería comer.-

-tú tienes la culpa por dejar así la cocina-reclamo Yamada, Yuto solo hizo un puchero desviando la mirada.-no desvíes la mirada, a mi debes de verme cuando te hablo!.-de verdad pareces mi esposo!, definitivamente no me casaría contigo!-finalizo Yuto, tomando asiento en el sofá, tomando el control para prender el televisor.

-a no, tú me ayudas a limpiar ese desastre. O te juro que te dejo sin comer.-Le grito Yamada, Yuto solo siguió con lo suyo, jamás pensó que vivir con Yamada Ryosuke, resultaría ser tan frustrante, él estaba acostumbrado a nunca hacer nada, tenía todo sin hacer nada, pero de algún modo le resultaba divertido.-

-está bien lo hare, pero a cambio me cocinaras-Pidió Yuto, Yamada saco un suspiro y hablo ya más calmado, al menos había logrado que el alto lo ayudara a limpiar algo que el mismo causo.-está bien…- Yuto solo sonrió y corrió hacia la cocina, pero no tardo ni un segundo allí.-¿y si mejor comemos afuera?-

-no!, así que vamos, toma ese trapeador y aquella escoba.-señalo lo que se utilizaba-Yo comenzare a limpiar y lavar los trastes.-Dijo amarrándose un delantal, al momento que se arremangaba sus mangas de su camisa blanca, Yuto solo asintió sintiendo como sus mejillas se tornaban color rojizo, no entendía el por qué… solo que de alguna extraña manera Yamada lucia demasiado apuesto con aquello puesto. Sacudió su cabeza, tratando de alejar aquellos extraños pensamientos, yendo por lo que Yamada le dijo.

Después de unos minutos o más bien 2 horas todo estuvo listo, Yuto se encontraba sentado en el comedor mirado desde allí a Yamada, quien se encontraba haciendo de comer para ambos, como era posible que pudiera aguantar tanto, pensó Yuto sin dejar de mirarlo.

De alguna manera eres admirable…

Pensó Yuto, sonriendo. Después de unos minutos más todo estuvo listo, Yamada comenzó a servir en porciones iguales-después de todo no serias un mal esposo…-la voz de Yuto sonó emocionada-basta deja de decir aquello, suena raro-Comento Yamada acabando de servir la comida-no tiene nada de malo, pero está bien como quieras… ahora hay que comer!-Exclamo con emoción al momento que comenzaba a comer aquel curry, que desde un inicio tenía un exquisito sabor, saboreo aquel delicioso sabor, definitivamente era el mejor que había probado en toda su vida que llevaba comiendo.-es el mejor que he probado en toda mi vida-exclamo Yuto con una sonrisa de oreja a oreja.

Yamada se sintió orgullo al escuchar aquello.-Gracias, ya me lo habían dicho antes-Le dijo sonriendo.-tienes una sonrisa muy hermosa, deberías sonreír más seguido… ha y por cierto el o la que te dijo aquello, dile que ya estas apartado, no pienso compartirte con nadie más.-finalizo Yuto siguiendo con lo suyo, Yamada casi se atraganta al escuchar aquello. ¿En qué momento fue que paso a pertenecerle a Nakajima?, pero que cosas más raras decía, decidió solo seguir comiendo, e ignorar aquellos comentarios.

Después de la comida, por obligación y un montón de amenazas Yuto ayudo a limpiar, subió hasta la habitación del mayor, y sin hacer caso al mayor se acostó en su cama.-¿Qué haces allí? Esa es mi cama, vete!-Dijo Yamada entrando, Yuto solo sonrió.-no lo hare, tu mama me dejo a cargo tuyo, y me dijo que me quedara aquí, así que ahora le are caso a ella y no a ti.-le regalo una sonrisa y se envolvió en las sabanas.-hazle como quieras, pero hay una cosa que te diré, este cuarto está sumamente ordenado y limpio, siempre quiero velo así!, y si te vas a quedar aquí tendrás que ser mucho más ordenado.-Yuto se removió entre las sabanas mostrando su rostro.-en verdad, ¿eres así siempre?-Yamada solo asintió, Yuto hizo una mueca y volvió a meterse debajo de las sabanas.

El mayor solo sonrió, quizá después de todo el tener un poco de compañía no estaría tan mal, necesitaba un amigo con él, y Yuto parecía una agradable persona, solo que tenía que hacerlo más ordenado. Se quitó la camisa y pantalón quedando solo en bóxer, bueno así dormía pero con Yuto a su lado, supuso que no sería ningún problema. Se acercó a su cama y abrió un poco las sabanas al momento que se metía en ellas.

Trato de conciliar el sueño hasta que sintió la respiración de Yuto en su espalda.-¿Nakajima, estas despierto?.-Susurro Yamada.-si, no puedo dormir.-hablo Yuto.-¿puedes alejarte de mí? E irte un poco más para allá.-suspiro un poco más tranquilo al sentir como Yuto se alejó, pero juraría que le había acariciado el trasero, decidió no hacer caso y cerró los ojos intentando dormir.

Al pasar unas horas Yuto se despertó, sintiendo sus mejillas arder al ver a Yamada cerca de, el.-como quieres que duerma bien si te tengo así…-murmuro Yuto mirando el durmiente rostro del mayor, lucia tan dulce y puro.-

Que me está pasando contigo…

Pensó al momento que acariciaba con suavidad el rostro del castaño, podía sentir la respiración suave y lenta de Yamada, ¿y si se acercaba un poco más?, sin pensarlo mucho lo hizo, sus labios rozaban, eso solo hizo que la tentación y deseo, se hicieran más fuertes, al querer probar aquello que estaba prohibido… un momento nadie le prohibió eso y mucho menos Yamada ¿verdad?

Sin decir nada término por unir sus labios, sintiendo como su corazón comenzaba a latir rápidamente, aunque fuera un beso no respondido, era el mejor que hubiera dado en toda su vida….

Supongo que estoy enamorado…

Pensó sin  apartarse ni un poco de aquellos suaves labios.

continuara...

PD: Hola, bueno hace poco estaba viendo un dorama y no se de momento me comenzaron estas ideas de un despreocupado Yuto y un ordenado Yamada xD y se me ocurrio un fic, asi que aqui esta :D se que aun no acabo el primer serial que comenze pero lo hare puesto que le dare seguimiento ambos :3 espero les guste :D Gracias por sus comentarios /u\ soy feliz al leerlos :´D